profesor.

Buen día dije tímidamente y con voz baja mientras buscaba un espacio  en la primera fila del lado izquierdo justo frente a ti, acomodaba mi cabello intentando atraer tu atencion, pero tu mirada y pensamiento estaban perdidos entre papeles, algo inquieto por darle marcha a lo que ya estaba por venír, estábas interesante, apuesto y exitante como aquella tarde cuando te observé lejanamente llevabas puestos unos jeans rotos,camiseta negra el cabello despeinado, estábas perfecto entónces y luces mas aún ahora, el lugar huele a ti, de saco y corbata que se verian mejor en el piso de una habitacion, observó cada uno de tus detalles, fingiendo no mirarte, pero en mi mente ya te hice el amor mil veces, buen día repito nuevamente esta vez con voz mas firmé, y no evito actuar seductoramente para traerte de nuevo a la realidad, tu mirada sube suavemente y siento su caricia, primero mi mano, dulcemente por mi brazo, acaricias mis pechos, besas mi cueño, tocas mis labios y te posas aqui en mis ojos me miras fijamente y un escalofrio recorre mi piel, cuantas vidas han pasado? Para poder sentirte de nuevo, en ese momento anheló el poder para desaparecer todo al rededor y fundirme en tus brazos sentir tu piel junto a la mía, tus manos en mi cintura y perderme en ti pero solo te sostengo la mirada que grita tomame, sonrio coquetamente intentando disimular solo puedo decir hola, el cerebro automaticamente quedo en blanco y solo estamos tu y yo en ese espacio de nada absoluta. tomame en tus brazos y viciame de ti, resuelve en mi vientre todas las maneras posibles de llevarme a la luna, aqui en mi mente habita la idea de ser un metal en bruto, una hoja en blanco donde podrás grabar mil pensamientos, nisiquiera te e tocado pero ya andube mil leguas por tu piel, me recosté en tu cerebro y pose mis senos sobre el, insitame, enseñame, e venido a sentarme aqui frente a ti, e venido a aprender como se incendia una piel, como sin tocarte ni un centimetro puedo quedar en tu memoria cada segundo de un día. Buen día, dije, mientras mis ojos te gritaban mil silencios, necesitó aprender como se seducen dos pensamientos y se fusionan, despertar al instinto y que el caballero lo acompañe, el cielo y el infierno dejame entrar, despacio, sin prisa descalza, ábreme la puerta a esa mente y prometo sembrar en ella los mejores recuerdos que jamas podras borrar, hola mucho gustó e llegado a seducir cada espacio de ti, hola, buen día , presente, mi apreciado profesor... 

DOMINETAR.