Mi cielo

 

entre el cielo y el suelo hay un espacio para dos, un lugar oculto en silencios donde abundan letras de poemas que aun no se escriben.

entre el cielo y el suelo te comería a versos de lunes en lunes, en cada faceta de la luna, durante cada estación del año, ven a mi ladito que te espero cada atardecer sentada en la acera con el café hecho, dime si hoy te quedaras, entre el cielo y el suelo del inmenso mar del cielo me encuentro yo, quien te espera desnuda a las 6 de la tarde 

entre el cielo y el suelo, en el breve espacio que creamos para ti y para mi, donde somos otro tu, otro yo, quien nadie conoce, quien nadie a visto, ven esta noche, encendere el fuego para ti platicaremos por horas de lo que se dijo sin hablar, acurruca tu cabeza a mi lado, cuéntame lo que te agobia déjame sobar tu sombra y duerme en mis piernas

entre el cielo y el suelo hay un lugar para dos seres que existen y se esperan con ansia de ser eternos unas horas, te iras antes del amanecer, con el primero rayo de luz del alba

y seras solo un sueño, pero mírame 

y escucha mis ojos, que te gritan un deseo

ser tuya por siempre, tuya hasta siempre,

sin pertenecerse entre el cielo y el suelo.

ven a mi mundo y hazlo girar con tu sonrisa

llévame lejos y no me sueltes, guardarme en la bolsa izquierda cerca de ti, que si llega la soledad le daré frente poniendo mis besos en tu hombro, entre el cielo y el suelo se detuvo el tiempo y me robe sin pensar tus minutos, en la guerra y en el amor todo se vale

y entre el cielo y el suelo me quedo con la victoria de tu pensamiento, dame un instante para detener el tiempo en tus brazos

aquí entre el cielo y el suelo te pienso, te sueño, te deseo.

minet